pellets
Mapa de Biocombustibles Sólidos 2025: más fábricas activas y estabilidad en la producción
El último inventario identifica 65 fábricas de pellet activas en España, dos más que en el mapa anterior, elaborado con datos de 2023
Según los datos declarados por los productores a AVEBIOM, la producción real de pellet en 2024 fue de 529.337 toneladas, frente a 681.706 toneladas en 2023, lo que supone una reducción del 22 %.
En 2022, muchos usuarios adelantaron sus compras ante la crisis energética, pero los inviernos suaves que siguieron redujeron el consumo real. Como resultado, el sector arrastró un importante volumen de pellet almacenado durante dos campañas. El mayor consumo registrado este invierno ha contribuido por fin a normalizar los niveles de stock.
La mayoría de las plantas (42 de 65, el 65 %) producen bajo certificación ENplus®, lo que garantiza la calidad y trazabilidad del pellet español. Estas fábricas son, además, las de mayor capacidad productiva, por lo que concentran alrededor del 85 % de la producción nacional, situando a España entre los países europeos con mayor volumen de pellet certificado.
En cuanto a sostenibilidad, una planta de pellet dispone de certificación SURE, un esquema que se aplica principalmente a biocombustibles destinados a redes de calor o proyectos industriales sujetos a los criterios de la Directiva RED III.
El inventario 2025 identifica 64 productores de astilla activos en España, los mismos que en el año anterior. El número de plantas que certifican su sostenibilidad con el esquema SURE se mantiene en 30, lo que confirma la confianza de los principales operadores del sector en España en este sello, especialmente los que suministran a redes de calor públicas e instalaciones industriales que deben acreditar el origen sostenible de la biomasa conforme a la Directiva Europea RED III y para cumplir con los requisitos de la Directiva ETS sobre reducción de emisiones verificables
Según las capacidades declaradas por los fabricantes, el potencial de producción nacional de astilla se sitúa alrededor del millón y medio de toneladas al año. Las plantas medianas y grandes se reparten principalmente por Castilla y León, Cataluña, Andalucía y el norte de la península.
El sector trabaja actualmente en torno al 60-70 % de esa capacidad, lo que garantiza disponibilidad de suministro para afrontar nuevos proyectos térmicos en expansión.
El crecimiento de la demanda en redes de calor y aplicaciones industriales, junto con la estabilidad de precios observada en 2024 y 2025, consolida a la astilla de madera como el biocombustible sólido más eficiente y sostenible para grandes instalaciones térmicas, y un pilar fundamental de la bioenergía española.
Hueso de aceituna: estabilidad y bioeconomía circular
l inventario 2025 mantiene 30 productores de hueso de aceituna activos en España, principalmente en Andalucía, Castilla-La Mancha y Extremadura, donde la industria oleícola genera un flujo constante de subproductos valorizables.
El número de plantas con certificación BIOmasud® se mantiene en siete, mientras que cinco cuentan además con el sello SURE, que acredita la sostenibilidad del biocombustible conforme a la Directiva Europea RED III.
El sector del hueso está estrechamente ligado a la actividad agrícola y agroindustrial, lo que le confiere un fuerte componente local y circular. Cada campaña, numerosas almazaras y cooperativas valorizan el hueso generado en el proceso de molturación, destinándolo a usos térmicos tanto propios como en entornos próximos.
Con su alto poder energético, su baja huella ambiental y su plena integración en la cadena agroindustrial, el hueso de aceituna mantiene un papel esencial dentro del mix de biocombustibles sólidos españoles, aportando sostenibilidad y autonomía energética local en los territorios rurales.
El pellet y resto de biocombustibles sólidos vuelven a ser la mejor opción en ahorro y sostenibilidad para calentar los hogares españoles en 2024
La Asociación Española de la Biomasa, AVEBIOM, publica la comparativa de precios entre las principales fuentes de energía disponibles en el mercado actual para calefacción doméstica con datos del primer semestre del año 2024 para ayudar a los consumidores a tomar decisiones informadas.
Con los precios de la energía sufriendo oscilaciones muy notables en los últimos años, los consumidores europeos y españoles se enfrentan a la necesidad de elegir la fuente de energía más adecuada para calentar sus hogares. Esta elección no debería apoyarse únicamente en el coste del momento, sino también en la estabilidad de los precios a lo largo del tiempo y el impacto ambiental de cada opción.
Se han utilizado datos procedentes de EUROSTAT, IDAE, MINETUR y MIBGAS, y los índices de precios de la biomasa (IPB) que elabora AVEBIOM de forma trimestral desde 2012 para pellet de madera, astilla y hueso de aceituna.
Biocombustibles sólidos: calefacción renovable y económica
Los biocombustibles sólidos como los pellets de madera, el hueso de aceituna y la astilla de madera siguen siendo las opciones más económicas y sostenibles para calefacción en 2024: ofrecen un coste significativamente más bajo que el de la electricidad y los combustibles fósiles, y su precio demuestra mayor estabilidad a lo largo del tiempo.
Así, en junio de 2024, los precios de los pellets de madera y de hueso de aceituna a granel se situaban por debajo de los 7 c€/kWh, mientras que la astilla de madera se mantiene como la opción claramente más económica, con precios rondando los 3 c€/kWh.
Los biocombustibles sólidos fueron la opción más competitiva para calefacción en 2022 incluso en los momentos en los que los precios del pellet y del hueso alcanzaron sus máximos históricos, en contra de la percepción de algunos usuarios. De hecho, calentarse con gas natural en 2022 fue un 44% más caro que hacerlo con pellets, y hacerlo con radiadores eléctricos, por ejemplo, costó el triple que calentarse con pellets.
Los precios de los biocombustibles sólidos al consumidor final empezaron a bajar ya en diciembre de 2022 y han seguido reduciéndose durante 2023 y 2024; así lo recoge el índice de precios (IPB) que elabora AVEBIOM trimestralmente para pellet, astilla y hueso, y el índice ex Works para pellet ENplus® en fábrica, calculado de forma mensual.
La electricidad, la opción más cara
La electricidad sigue siendo una de las opciones más caras para calentar una vivienda. Aunque en 2023 y 2024 los precios disminuyeron ligeramente tras la crisis energética de 2022, en junio de 2024 se situó alrededor de los 14 c€/kWh. Incluso considerando su uso con una bomba de calor, teniendo en cuenta un SCOP realista de 2,5 (coeficiente de rendimiento estacional), calentarse con electricidad marcó el máximo de todas las tecnologías con 9,74 c€/kWh en junio de este año, como se refleja en el gráfico.
La intermitencia en la generación de la eólica y solar y la limitada interconexión con otros mercados europeos mantienen los precios elevados. Aunque en los próximos meses los precios de la electricidad se mantendrán probablemente más bajos que los picos de 2022, la volatilidad sigue siendo un riesgo, especialmente si la demanda crece más rápido que la capacidad de generación renovable.
Gas natural y gasóleo C
En cuanto al gas natural, se sitúa como la tercera opción más cara para calefacción en España. En junio de 2024, la TUR2 (para contratos de >5.000 kWh/año) se sitúa alrededor de los 8,2 c€/kWh.
Aunque su precio ha experimentado una notable caída en 2023 y 2024, tras los picos históricos de 2022, debido a la estabilización del mercado internacional de energía, la diversificación de fuentes de suministro y la reducción en la demanda, podría volver a aumentar en los próximos meses si la demanda global se recupera o si surgen nuevas tensiones geopolíticas. Así, aunque en algunos momentos se sitúa como una opción competitiva, los consumidores han de estar atentos a posibles fluctuaciones como las ya acontecidas en años anteriores.
Con 9,18 c€/kWh en junio de 2024, el gasóleo C es la fuente de energía más cara después de la bomba de calor eléctrica.
A pesar de que es una de las opciones más comunes para calefacción en zonas rurales y en viviendas que no tienen acceso al gas natural, su uso sigue disminuyendo debido a la creciente adopción de alternativas más sostenibles y a la volatilidad en los precios del mercado de combustibles fósiles.
Castilla y León cuenta con 12 centros de producción de pellets y otros 12 de astillas para biomasa
El Mapa de los Biocombustibles Sólidos 2023 elaborado por AVEBIOM, y actualizado en agosto de 2023, muestra la ubicación y datos de 67 fábricas de pellet, 57 de astilla y 31 de hueso de aceituna inventariadas en el último año en España. En el caso de Castilla y León, con fecha de agosto del 2023, contaba con un total de 12 dentro de producción de pellets y otros 12 centros de producción de astillas.
El Mapa ofrece también información de los 37 distribuidores de pellet certificados ENplus® y de los fabricantes y distribuidores de astilla, hueso y leña certificados BIOmasud®. Desde esta edición, el mapa comenzará a distinguir a las empresas que certifican su sostenibilidad conforme a lo dispuesto en la Directiva Europea de Energías Renovables REDII.
Las 67 plantas de pellet se distribuyen por todo el país, aunque la mayor parte se concentra en la mitad norte, lo mismo que la producción. Desaparecen del mapa 6 fábricas, que no han conseguido afianzarse por diversos motivos, y se suman dos nuevos proyectos ya en operación en las provincias de Ourense y de Cuenca.
En 2022, cuatro de las fábricas con mayor capacidad aumentaron en más de 10.000 toneladas sus producciones anuales: ENERBÍO, en Cataluña; y BURPELLET-CYLPELLET y NATURPELLET, en Castilla y León. Estas cuatro plantas sirvieron el año pasado más de 200.000 toneladas de pellet certificado ENplus® A1, cerca de la tercera parte de todo el volumen fabricado en España.
Otras 20 fábricas aumentaron producción, nueve de ellas con incrementos superiores a las 1.000 toneladas al año. Y 20 plantas no han facilitado sus datos de fabricación, pero en general se trata de instalaciones con producciones pequeñas.
La producción total nacional en 2022 superó las 635.000 toneladas, casi 90.000 más que el año anterior. Las 36 fábricas que cuentan con certificado ENplus® en vigor, garantizan que más del 90% de la producción española de pellets tiene calidad A1.
En la septiembre de 2023, hay 36 fábricas y 37 empresas distribuidoras con certificado activo en el sello de calidad ENplus®.
En cuanto a la producción de astilla, AVEBIOM ha inventariado 57 plantas en España. De las que han facilitado sus datos, tan solo una supera las 60.000 toneladas al año de producción y seis fabrican más de 30.000 toneladas. Varias plantas han aumentado capacidad este año.
En el último año han certificado la sostenibilidad de su actividad con la entidad SURE dieciocho instalaciones. Maderas Campos es la única que, además, certifica la calidad de la producción con BIOmasud®.
Por otra parte, se han inventariado 31 plantas donde se obtiene hueso de aceituna, dos más que en 2022. Cinco instalaciones han tenido producciones inferiores al año anterior debido a la anómala cosecha de la temporada 2022-23, y tan solo una aumenta su capacidad. En total, seis plantas y un distribuidor están certificados con BIOmasud®.
Castilla y León lidera la producción de pellets en España con el 24% de la capacidad total
La fabricación nacional de pellets en 2021 superó el bache de 2020 y ascendió por encima de las 640.000 toneladas. Las estimaciones para 2022 indican que se batirá el récord de producción de 2019, de manera que se superarán con creces las 750.000 toneladas puestas en el mercado. El consumo de pellet continúa aumentado año tras año y en 2021 las calefacciones españolas requirieron 780.000 toneladas, con el sector residencial unifamiliar como principal consumidor absorbiendo el 67% de todo el consumo. Prácticamente todo el pellet importado para satisfacer las necesidades del mercado español provino de Portugal.
La Asociación Española de la Biomasa, AVEBIOM, acaba de publicar el nuevo informe estadístico sobre el mercado de los pellets de madera. En este informe se pueden encontrar datos de producción y de consumo de pellets de madera tanto a nivel nacional como por comunidades autónomas. También incluye estadísticas sobre la evolución del sistema de certificación ENplus® en España.
Castilla y León contaba a finales del 2021 con 13 fábricas de pellets, dos más que en el año 2017. Con una capacidad de producción de 475.400 tn, lo que supone el 24% del total nacional.
En 2021 se ha producido un aumento de productividad de las fábricas que coincide con un descenso del número de plantas censadas respecto al año anterior, que pasaron de 85 a 75 instalaciones operativas, y a 76 en el presente año. En general, las plantas que desaparecen son muy pequeñas o ya llevaban tiempo sin actividad por lo que estos cierres apenas han afectado a las cifras de producción. En cambio, varias empresas han realizado mejoras en los últimos meses para aumentar capacidad, de ahí el incremento global.
La crisis energética que comenzó en 2020 parece enquistarse y muchos ciudadanos y empresas de toda la UE han hecho realidad la opción del cambio de tecnología durante los últimos meses. Así, en paralelo al incremento récord del 40% en la instalación de estufas y calderas ocurrido en nuestro país durante 2021, también ha aumentado el consumo de pellets en un 13,5%. En la UE durante 2021, según cálculos de Bioenergy Europe, aumentó en un 18%.
En 2022 esperamos que el consumo crezca nuevamente y ronde las 865.000 toneladas. Los fabricantes nacionales han hecho un gran esfuerzo en este complejo año, aumentando producción y priorizando su servicio a clientes españoles; así, vemos que la curva de producción vuelve a acercarse a las cantidades que necesitan los usuarios de equipos de pellet en el país.
La mayor parte de la producción nacional ya está certificada ENplus® copando el 87% del mercado; prácticamente todas las plantas importantes producen bajo el esquema de calidad, pero cada año se suman nuevos distribuidores, lo que mejora la consistencia de una oferta de calidad al consumidor. Entre 2020 y diciembre de 2022 se han certificado 2 nuevas plantas y 9 suministradores, alcanzando los 100 certificados emitidos en España.
Aunque el informe estadístico no analiza los precios, Pablo Rodero, responsable de certificación en AVEBIOM y actual presidente del Consejo Europeo del Pellet (EPC), destaca que “a pesar de la notable subida que ha sufrido el precio del pellet este año, su coste energético (€/kWh) se ha mantenido siempre inferior al de cualquier combustible fósil o la electricidad. En Europa ya es evidente un cambio de tendencia a la baja en los precios del pellet y también de la astilla, que pronto se ha de empezar a notar también en España”.
De hecho, desde el mes de octubre la curva de precios del pellet para uso doméstico ha empezado a suavizarse y el precio medio del saco de 15 kg se a finales de noviembre se situaba en 7,79 €, siendo posible encontrarlo a precios inferiores.
Las estadísticas de este informe se han realizado gracias a los datos recabados específicamente por AVEBIOM durante los meses de junio a agosto de 2022 para elaborar el propio informe y el mapa de biocombustibles que publicamos en nuestra revista Biomasa News. Además, estos datos forman parte del informe estadístico que anualmente desarrolla BIOENERGY EUROPE, la asociación europea de la bioenergía, y que ha sido publicado en noviembre de 2022.
España cuenta con 163 centros de fabricación de pellets, astillas, hueso y leña
El Mapa de los Biocombustibles Sólidos 2022 elaborado por AVEBIOM, y actualizado en septiembre de 2022, muestra la ubicación y datos de 73 fábricas de pellet, 57 de astilla y 29 de hueso de aceituna inventariadas en el último año en España.
También ofrece información de los 35 distribuidores certificados ENplus® de pellet y, por primera vez, de los fabricantes y distribuidores de leña certificados BIOmasud®. Por otra parte, incluye datos de los 54 centros de pellet, astilla y hueso en Portugal.
Plantas de pellet
Todas las comunidades autónomas, salvo Canarias y las ciudades de Ceuta y Melilla, cuentan con alguna planta de pellet. Las 83 fábricas inventariadas por AVEBIOM en abril de 2020 se encuentran distribuidas por 31 provincias de las 50 que componen el Estado español. Y entre todas suman una capacidad teórica de producción cercana a 2.000.000 de toneladas al año.
“Para lo que queda de temporada, las fábricas de pellet en España se han comprometido a garantizar el suministro de pellet a sus clientes nacionales y apenas se exporta pellet a otros países. Ciertamente, según se comporte el invierno puede haber tensiones y, en algún momento puntual, en alguna zona concreta, puede haber plazos de entrega más dilatados de lo acostumbrado, pero habrá pellet y también otros biocombustibles sólidos como astilla, leña y hueso de aceituna.”, según Pablo Rodero, actual presidente del Consejo Europeo del Pellet y responsable de la certificación ENplus® en España.
En 2021, diecisiete plantas fabricaron más de 10.000 toneladas de pellet poniendo en el mercado más de 465.000 toneladas. Todas ellas, salvo una, están certificadas ENplus® y se encuentran en la mitad norte de la península, a excepción de dos, que se ubican en Albacete y Granada.
Otras 29 plantas han declarado producciones inferiores a 10.000 toneladas y fabricaron algo más de 78.500 toneladas. Por último 27 fábricas no facilitaron sus datos de producción para 2021.
En la actualidad, hay 37 plantas y 39 empresas distribuidoras con certificado activo en el sello de calidad ENplus®.
En cuanto a la producción de astilla, AVEBIOM ha inventariado 57 plantas en España, dos menos que en 2021. Sin embargo, aumenta la capacidad total gracias q que ahora son seis productores, dos más que el año pasado, los que tienen capacidad para producir más de 60.000 toneladas de astilla al año, ubicados en Asturias, A Coruña, Valencia, Girona y Barcelona. Y, además, se une un productor más a los de capacidad superior a 30.000 t/año. El resto
Por otra parte, se han inventariado 29 plantas donde se obtiene hueso de aceituna, cuatro más que en 2021; los mayores productores están en Jaén, Albacete y Madrid, con producciones superiores a 10.000 toneladas al año. Tres fabricantes se han certificado BIOmasud® en 2021 y ya son siete plantas y un distribuidor. También en el último año se han certificado las 4 primeras empresas productoras de leña. La inclusión de los equipos de calefacción con leña entre los sistemas subvencionables por el gobierno, siempre que se garantice una humedad máxima del 20%, puede ser un acicate para que más productores de leña se animen a certificarse en BIOmasud®
La suspensión a la importación certificada de pellets de Rusia abre oportunidades de negocio a los fabricantes de Castilla y León
La decisión del Consejo Europeo del Pellet de suspender todos los productores, distribuidores y proveedores de servicios certificados por ENplus® con sede en Rusia y Bielorrusia a partir del 15 de abril de 2022, abre nuevas oportunidades de negocio a las empresas productoras de Castilla y León. Hay que tener en cuenta que los fabricantes rusos enviaban cada año a distintos mercados europeos unos dos millones y medio de toneladas de pellets, que deberán sus reemplazados por empresas de otros mercados. El mercado alemán era uno de los principales clientes del pellets ruso.
ENplus® es un esquema de certificación basado en valores que incluyen un nivel máximo de responsabilidad social pero también respeto absoluto al estado de derecho. Los miembros del Consejo Europeo del Pellet (EPC) se sienten profundamente preocupados por la agresiva invasión rusa del país soberano de Ucrania y condena enérgicamente esta brutal falta de respeto a los principios democráticos y la violación de los derechos humanos.
Las acciones del gobierno ruso, asistido por Bielorrusia, contradicen los valores del EPC y han sido consideradas por sus miembros como completamente inaceptables. Por lo tanto, después de una evaluación meticulosa de la situación, el EPC ha decidido suspender a todos los productores, distribuidores y proveedores de servicios certificados por ENplus® con sede en Rusia y Bielorrusia a partir del 15 de abril de 2022.
Esto significa que ninguna de estas empresas podrá vender pellets certificados ENplus® mientras permanezca la suspensión, ni se aceptarán nuevas solicitudes de certificación de estos dos países.
Desde AVEBIOM, como responsables de la certificación ENplus® en España, apoyamos la decisión del Consejo Europeo del Pellet. En cuanto a los efectos que puede tener la medida sobre el mercado español, es posible que aumente la demanda a nuestros productores por parte de los distribuidores internacionales que buscarán suplir los dos millones y medio de toneladas que fabrican y, hasta este momento, enviaban a Europa los fabricantes rusos.
Los miembros del EPC han tomado esta decisión no solo teniendo en cuenta el impacto inmediato previsto en las empresas rusas y bielorrusas, que viene a reforzar las sanciones de la UE, sino también plenamente conscientes de las inevitables consecuencias negativas para una variedad de partes interesadas y, en última instancia, para el mercado europeo de pellets. Sin embargo, apoyar al pueblo ucraniano y proteger la integridad del esquema siguen siendo las principales preocupaciones detrás de la suspensión.
El Consejo Europeo del Pellet se compromete así a mantener intacto el proceso de certificación y en línea con sus estándares y principios para el resto de los negocios de pellets en Europa y más allá. EPC también ha publicado una guía sobre la implementación de los requisitos de ENplus® para las empresas afectadas por la guerra en Ucrania.
Castilla y León lidera la producción de pellets en España con 14 fábricas y 153.467 tn de producción
La Asociación Española de la Biomasa, AVEBIOM ha publicado el “Informe estadístico sobre producción y consumo de pellets en España durante 2020”. En ese año, España consumió 705.000 toneladas de pellet, sobre todo en el sector residencial unifamiliar, que se mantiene como el principal usuario de este biocombustible renovable, sostenible y económico. El 86% de las 616.000 toneladas de pellet que se fabricaron en España estaba certificado ENplus®.
En 2020, las 85 plantas de pellets operativas en España fabricaron 616.000 toneladas de este biocombustible. Casi 100.000 menos que en 2019, cuando se alcanzó la cifra récord de 714.000 toneladas. El efecto de la pandemia sobre la actividad en las fábricas y, sobre todo, un invierno suave están detrás de está menor producción. Castilla y León dispone de 14 fábricas de pellets, tres más que en el año 2017. Por número de fábricas, está empatada con Andalucía, aunque su capacidad máxima de fabricación es mucho mayor, hasta 469.000 tn, casi un tercio del total nacional. La producción en el año 2020 quedó muy lejos del teórico, en 153.467 tn.
Al finalizar el presente año 2021 se podría superar este récord con 716.000 toneladas, una tendencia que proseguiría durante 2022 con una previsión de aumento tanto de la capacidad máxima teórica del país -que se situaría en los 2.000.000 de toneladas al año- como de la producción real, que rozaría las 800.000 toneladas anuales.
A pesar de la menor producción, en 2020 el consumo de pellets aumentó en comparación con 2019 acercándose a las 705.000 toneladas.
“En las últimas semanas, fabricantes y distribuidores de equipos nos están comunicando aumentos significativos de las ventas, por lo que en 2022 veremos un crecimiento del consumo por encima de lo estimado en el informe, ya que los sondeos se realizaron antes del incremento de precios de los combustibles fósiles y, además, el otoño está siendo más frío de lo normal”, aclara Pablo Rodero, responsable de certificación de biocombustibles en AVEBIOM y actual presidente del Consejo Europeo del Pellet.
El sector de la calefacción residencial sigue instalando equipos en viviendas unifamiliares y se mantiene como el mayor usuario de pellets en España: en 2020 aumentó el consumo hasta las 458.000 toneladas, el 65% del total utilizado en el país.
Las instalaciones de potencia superior a 50 kW, mayoritariamente calderas en redes de calor, bloques de viviendas, edificios públicos y en industria, consumieron cerca del 35% del total.
La producción y el consumo de pellets en nuestro país han ido prácticamente a la par desde 2012. Tan solo en 2020 vemos un ligero desajuste entre la oferta y la demanda nacional, remontando con importaciones de proximidad desde Portugal y que tenderá a corregirse en los próximos dos años.
De hecho, el saldo neto entre importaciones y exportaciones en 2020 fue de 46.000 toneladas en 2020; tan solo un 6,5% del consumo total del año.
España sigue aumentando el porcentaje de pellet con calidad certificada año tras año. En 2020, 39 plantas -entre las que figuran todas las de gran capacidad- produjeron pellet certificado ENplus®, poniendo en el mercado el 86% del pellet que se fabricó en España -esto es 531.000 toneladas-, un 4% más que en 2019. El compromiso de los fabricantes y la responsabilidad de los consumidores están permitiendo que se afiance la presencia de un biocombustible renovable, sostenible y creador de empleo en el país.
El sector de la biomasa espera una alta demanda este invierno ante los precios disparados de gas, luz y gasóleo
Con la llegada del invierno, el sector de la biomasa alcanza su punto álgido, que en la actual coyuntura de precios disparados de luz, gas y petróleo puede suponer un punto de inflexión en el sector.
Según un Javier Díaz González, Presidente de AVEBIOM, “en las últimas semanas, estamos viendo cómo la biomasa aparece en periódicos y noticiarios como una solución fiable, limpia y económica para calentar los hogares españoles. Y es que así es: España tiene la fortuna de contar con enormes recursos energéticos renovables, como el sol y el viento, que todo el mundo reconoce, y también la biomasa, que aporta en este momento el 14% de toda la calefacción en nuestro país. Es, de hecho, la principal fuente de energía renovable para este uso.
El precio del litro de gasóleo de calefacción ha pasado de 0,515 € hace justo un año a 0,855 €/l en los últimos días de octubre de 2021. Una subida del 66% en tan solo un año, que resultará difícil de sobrellevar a muchas familias.
Por el contrario, los precios de los biocombustibles sólidos para uso doméstico se mantienen en unos rangos muy contenidos a lo largo de los años, como muestra el Índice de Precios de la Biomasa que elabora la Asociación Española de la Biomasa de forma trimestral desde 2012.
Así, por ejemplo, el pellet distribuido a granel en camión cisterna tiene un precio hoy de 256,62 €/tonelada, mientras que hace un año era de 255,77 €/ton.
En el caso de la astilla forestal acondicionada para uso doméstico, el precio es aún más competitivo para el usuario, con una media histórica de 110 €/ton, incluido el transporte.
La cuenta es fácil de hacer: 2 kilógramos de pellet contienen la misma energía que 1 litro de gasóleo, por lo que una familia que consuma 3.000 litros de gasóleo al año, ahorraría más de 1.000 euros si lo sustituyese por pellets. El ahorro sería aún mayor si el cambio es a astilla, cuya equivalencia energética es de 2,5 kg de astilla por litro de gasóleo: esta familia recortaría más de 1.700 euros en su factura anual.
Por su parte, la OCU ha elaborado recientemente una comparativa entre sistemas de calefacción para una vivienda de 90 m2 en una región fría. Se sitúan en cabeza con claridad los equipos de pellets, seguidos de las bombas de calor y el gas natural”
Para el presidente de AVEBIOM, “en la actualidad, la industria de la bioenergía dispone de calderas y estufas para uso doméstico de elevadas prestaciones y eficiencia, automatizadas y con emisiones prácticamente nulas.
Esto, junto con la estandarización de los biocombustibles a escala mundial son las claves para que el parque europeo de equipos de biomasa supere ya los 7 millones de unidades. La biomasa aporta más del 80% de toda la energía renovable en la UE, más que la suma de lo que aportan la solar, la eólica y la hidráulica juntas.
En cuanto al gas natural, un combustible fósil que se ha colado en nuestras casas gracias a excelentes campañas de marketing, la volatilidad de su precio, ahora mismo en subida libre -se ha incrementado más de un 250% en lo que va de año y la tendencia se mantiene-, y la preocupación continua sobre la seguridad del suministro derivada de su procedencia geográfica, no nos parecen buenos argumentos para seguir apostando por su uso.
En la actualidad, según las estimaciones realizadas por el Observatorio de la Biomasa de AVEBIOM, el parque nacional de equipos de calefacción alimentados con biocombustibles sólidos superará las 440.000 unidades a final de año.
El Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) prevé que entre 2020 y 2030, España puede aumentar la contribución de la biomasa para generar calor en 400 ktep (equivalente al consumo actual en calefacción y ACS de 710.500 hogares españoles), lo que requiere la movilización de 1,2 millones de toneladas de biomasa más.
En verdad, el objetivo del PNIEC nos parece poco ambicioso y, de hecho, según el proyecto Agrobioheat las cifras podrían triplicarse si se movilizasen biomasas de origen agrícola como las podas de frutales, la paja de cereal o el hueso de aceituna, entre otras”.
España cuenta con 75 plantas de pellets, 59 de producción de astillas y 26 de huesos de aceituna
AVEBIOM ha vuelto a actualizar el mapa de la biomasa industrial en España, que recoge un total de 75 plantas de pellets abiertas durante 2020-2021 en España, 8 menos que en el anterior inventario. En este excepcional periodo, 9 fábricas han cesado su actividad de manera definitiva. En general contaban con una producción escasa, o bien ya estaban inactivas a finales de 2020. En el último año solo ha comenzado a trabajar una nueva planta, en Burgos, con una partida inicial de 2.000 toneladas de pellet. Y siguen sin arrancar las 3 fábricas de Sunwood en Jaén y Cuenca y la de Euroil Biomasa también en Jaén.
Solo 10 fábricas aumentaron este año su producción en comparación con la temporada 2019-2020, mientras que 31 redujeron su actividad, en ocasiones de forma notable, entre ellas algunas de las instalaciones más grandes del país.
Los pequeños productores prácticamente han mantenido sus números. Un invierno no muy frío y la acumulación de existencias pueden ser las causas de que en esta última temporada se hayan fabricado alrededor de 510.000 toneladas de pellets, 160.000 toneladas menos que el año anterior.
El número de fábricas con producción certificada ENplus® aumenta en dos y ya son 41 instalaciones las que cuentan con el sello de calidad. El 87% de la producción de pellets en España está certificada ENplus®. Ninguna de las plantas que han cerrado estaba certificada.
En cuanto a los distribuidores certificados para el suministro de pellet ENplus®, la lista de certificados activos se amplía con 8 nuevas empresas y ya son 36 en todo el país.
AVEBIOM ha inventariado 59 plantas de producción de astillas, 2 menos que en 2020. Seis centros cierran y cuatro nuevos empiezan a producir: dos gestionados por Veolia en Valladolid y Palma de Mallorca, y otros dos asociados a las fábricas de pellets de Naturbero en Guipuzcoa y de Maderas Campos en Jaén.
La mayoría de los centros tiene producciones inferiores a 30.000 toneladas al año -las dos terceras partes tienen capacidad para producir hasta 10.000 toneladas-. Nueve instalaciones producen más de 30.000 toneladas, y solo tres de ellas, todas en la región del mediterráneo oriental, son capaces de superar las 60.000 t/año.
Dos productores más se han certificado en BIOmasud® y ya son cinco en todo el país los que ofrecen astilla de calidad: Alcolea Biomass Center y Greenalia Woodchips, que también son distribuidores certificados, Pallet Tama, Naparpellet y Maderas Campos.
El último inventario de productores de hueso de aceituna recoge un total de 26 fábricas, una más que en el inventario anterior. Las producciones por fábrica son, por lo general, inferiores a las 10.000 t/año, aunque esto varía con la campaña anual de la aceituna y este año seis centros reportan capacidades superiores a 10.000 t/año; dos de ellas capaces de alcanzar las 60.000 t/año. Un nuevo certificado BIOmasud® eleva el número total de productores con el sello a cuatro: Biocombustibles del Mediterráneo, Combustibles Cabello, Ecoloma Biocombustibles y Maderas Campos. A los que hay que añadir dos distribuidores certificados.
ENplus® espera certificar más de 14 millones de toneladas de pellet en 2021
ENplus® confirma que en 2020 la producción total de pellets certificados alcanzó los 12,3 millones de toneladas y prevé que la cantidad para el año en curso supere los 14 millones de toneladas, según se deriva de los datos aportados por los productores al Consejo Europeo del Pellet -EPC-. Estos volúmenes récord están ligados a la continua expansión del esquema y al creciente número de empresas certificadas.
Hace un mes, ENplus® anunciaba que superaba los 1.100 los productores y distribuidores de pellets con certificados activos en 47 países de todo el mundo.
Donde más se ha extendido recientemente el esquema de certificación ha sido en Polonia, Ucrania y Rusia; allí radican la mayoría de las últimas empresas que se han certificado, aunque también se registra un creciente interés por el sistema entre de las empresas de pellets de América del Sur.
Con más de 3 millones de toneladas, Alemania se mantiene como el mayor productor de pellets certificados ENplus® en 2020. Austria continúa en segundo lugar seguido de Rusia, mientras que Polonia ha ocupado el cuarto lugar por delante de Francia y España. Todos los países del “top 6” han aumentado su producción certificada respecto al año anterior, salvo Francia.
“Seguimos observando una fuerte demanda de certificación en la mayoría de los países de Europa. Según los últimos datos que tenemos, la producción certificada ENplus® representa más del 85% de los volúmenes de pellet en al menos 10 países europeos. Dadas las circunstancias actuales marcadas por la pandemia y los programas nacionales para la transición hacia una energía más verde, esperamos que muchos más usuarios finales busquen pellets de alta calidad, lo que pronostica un futuro prometedor para la certificación”, según Catalina Elena Dumitru, directora del sistema.
En España, en 2020 se certificaron más de 450.000 toneladas, un 10,8% más que en 2019. Pablo Rodero, responsable de la certificación en España y presidente del Consejo Europeo del Pellet, señala que nuestro país “sigue la tendencia positiva en Europa y el resto del mundo en el uso de pellet certificado por el cada vez mayor conocimiento y compromiso medioambiental de los ciudadanos”.
La dirección de ENplus® sigue destinando considerables recursos a acabar con el fraude en el uso del sello. Hasta abril de 2021, se han identificado y resuelto cerca de 740 casos de fraude.
- 1
- 2
- Siguiente →








